golosinas de la infancia España
¿Alguna vez has pensado la cantidad de recuerdos que tenemos asociados a los dulces y las golosinas más típicas de nuestro país? Los dulces, como otros muchos alimentos, están muy vinculados a nuestro crecimiento. Y, por ello, no podemos olvidar algunos de los momentos en los que nos han ido acompañando este tipo de alimentos.
Desde Mi Capricho, como tienda online de golosinas líder en Canarias, hemos seleccionado algunas de las golosinas más típicas de nuestra infancia en España. Si estás interesado en conocer cuáles son, continúa leyendo. ¡Te contamos todo lo que tienes que saber!
Las golosinas de la infancia en España
Los caramelos Chimos
¿Recuerdas esos caramelos tan característicos que contaban con un agujero en la mitad del mismo? Su forma geométrica era toda una declaración de intenciones. ¡Hablamos de los caramelos Chimos! Y es que cuando los metíamos en nuestra boca… ¡disfrutábamos de una explosión de sabores sin igual!
Con el tiempo, fueron irrumpiendo una gran cantidad de sabores con los que satisfacer a los paladares más exigentes. Sin duda, uno de esos caramelos capaces de marcar un antes y un después en nuestro paladar. ¿Te imaginas poder volver a disfrutar en la actualidad de todo su sabor?
Lenguas picantes
Las lenguas picantes son otra de las chucherías que han marcado un antes y un después en la industria de las chucherías. Desde hace muchos años, incluso en la actualidad, se han convertido en una de las opciones que siempre están presentes en cualquier bolsa de chucherías que se precie.
Su inconfudible sabor, así como su textura, se han convertido en dos de los elementos que no podemos dejar pasar. ?¿A quién no le apetece una ahora mismo?
Los chices Bubbaloo
¿Recuerdas esos chicles que, en el momento de morderlos, desprendían un líquido repleto de sabor en su interior? Pese a que han pasado varias décadas desde entonces, ¡todavía no conocemos la composición de ese característico líquido! Sin embargo, ¿recuerdas qué bueno estaba? Sin duda, una de las señas de identidad del dulce en nuestra infancia.
Podíamos encontrar dos sabores en el mercado: fresa o menta. En ambos casos, el líquido del interior iba en consonancia con el sabor exterior.
Peta Zetas
Si tenemos que destacar una golosina que nos ha acompañado durante toda nuestra infancia esta es, sin duda alguna, los Peta Zetas. Si no lo recuerdas, se trataba de un sobre que incorporaba un pequeño palito en forma de caramelo que servía de cuchara. Únicamente debíamos verter unos pocos polvos sobre nuestra lengua para poder disfrutar al máximo de todo el movimiento que generaban este tipo de golosinas.
Además, su sabor a fresa se convertía en una de las principales señas de identidad de este tipo de chucherías.
Chupachups Kojac
Kojac era un tipo de chupachup que se caracteriza por el chicle con el que contaba en su interior. Su tamaño era mucho más grande al de los chupachups tradicionales. Sin embargo, lo que realmente llamaba la atención es que en el momento de consumirlo podíamos disfrutar de un excelente chicle que nos permitía disfrutar de unos minutos extra de sabor.
La parte exterior desprendía un sabor a fresa muy intenso. En algunos casos, incluso picante. Sin embargo, una vez acostumbrados… ¡no podíamos dejarlo pasar! No fueron pocas las ocasiones en las que seguro que masticábamos inicialmente el caramelo para disfrutar a posterior del chicle. ¡Qué recuerdos!
